Desde 2013, se subvencionan proyectos de desarrollo con énfasis en servicios sostenibles de interés general, buen gobierno local o protección climática y adaptación al cambio climático en un país contraparte. También se aceptan propuestas de proyecto que vinculen de forma innovadora los temas de futuro «migración y desarrollo» o «comercio justo», respectivamente «adquisición justa sostenible» en la labor de cooperación para el desarrollo.